lunes, 16 de mayo de 2016

RETOS DE LA PRIMERA UNIDAD

¿Qué entiendo por ciudadanía digital?

La invasión tecnológica en una gran parte de la sociedad mundial, ha generado multitud de cambios en las formas de vida. Si hiciéramos una comparativa con respecto al momento histórico en el que las personas no sabían que era ni para qué servía un ordenador, o un teléfono móvil, automáticamente pensaríamos que parte de sus preocupaciones o necesidades eran otras completamente diferentes a las actuales. 

Las tecnologías llegaron para quedarse, la sociedad industrializada y los sistemas capitalistas les dieron la bienvenida y la sociedad en su conjunto las  fue integrando en su día a día, algun@s con mayores reticencias o dificultades típicas de principiante. Al fin y al cabo nos dimos cuenta de que nos facilitaban labores tediosas, que nos ahorraban tiempo y esfuerzo y que además nos servían para comunicarnos.

Desde mi punto de vista, alguien que tuvo la suerte de aprender a manejar "máquinas" (ordenadores, teléfonos...) o de beneficiarme de los servicios de otras muchas a una edad temprana, considero que las nuevas tecnologías nos han posicionado en una clase social capaz de apreciar las dificultades que la vida presenta con mayores y mejores herramientas, en definitiva con mayores posibilidades para desenvolvernos con éxito.


¿Qué sé sobre el significado de ser ciudadano culto y autónomo en la sociedad digital?

La ciudadanía que ha desarrollado las competencias necesarias para dominar entornos digitales variados con un nivel de autonomía adecuado, eso, es ser a mi juicio una persona culta en la sociedad digital. Opino que en nuestra sociedad tener un nivel de usuario avanzado y utilizar las nuevas tecnologías en nuestro día a día, nos hace sin duda ser ciudadanos del siglo XXI.


¿Qué pienso acerca de cuál es el modelo educativo más apropiado para la formación de este tipo de ciudadanía?

Desde luego que nuestro sistema educativo se ha visto "amenazado" ante la nueva oleada de cambios que ha supuesto la llegada de las nuevas tecnologías. Éstas se han colado en las distintas instituciones: clases de Educación Infantil, Primaria, en la Universidad por supuesto…y sin el ánimo de caer en un discurso pesimista, considero que nuevos modelos educativos tienen todavía muchos detractores para que se realice un cambio profundo.

Carlos Magro en algún que otro congreso ha dejado dicho que hace falta más poética en las aulas y menos burocracia, por lo que los nuevos modelos educativos necesitan ser resoñados, necesitamos creernos que aquí también hay recursos humanos y materiales que puedan hacer posible ese cambio. 

Como docente considero que el modelo educativo adecuado para este tipo de ciudadanía debe estar basado en partir de las inquietudes del alumnado así como en las necesidades que le acechan. Este alumnado debe tener claro para qué le sirve aprender cualquier contenido. Por otro lado, ese nuevo modelo educativo debe romper con la idea del docente como único conocedor de la información, los discentes pueden aportar en todo momento nueva información, la cuál, si es compartida y relacionada con otras áreas mejor. En resumen, debe fomentar un aprendizaje competencial, que tenga en cuenta al individuo y al grupo y aportar soluciones a problemas o crear conocimientos.





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